lunes, 12 de noviembre de 2012

¿Qué nos dejó el 411?


4 de noviembre de 2012 ya sueña a viejo, en las elecciones municipales menos concurridas de la historia, el FSLN se asignó 134 alcaldías de 153 posibles. A pesar de lo vacío que se vieron los Centros de Votación, los magistrados de facto del CSE gritaron a los cuatro vientos que la fiesta cívica había sido un rotundo éxito, aunque más bien parecía un triste velatorio. Los números no concuerdan con lo anunciado por el CSE. En la página del Poder Electoral se puede ver que 1.995.373 nicaragüenses ejercieron su voto por una opción política (No incluye los votos nulos), mientras que en las igualmente fraudulentas Elecciones de 2008 votaron 2.049.140 ciudadanos (Tomado del portal de Hagamos Democracia), para una diferencia  negativa de 53.767 personas, esto a pesar de que, según expertos, el Padrón aumenta en 100.000 nicaragüenses cada año. Los departamentos en los que se disminuyó la participación fue en: Managua. Masaya, RAAS, Estelí, Chinandega, Granada y Matagalpa (En ese orden). En Chontales y la RAAN la cantidad que si votó fue mayor prácticamente el doble que los que votaron en 2008, algo que es bastante peculiar ya que ahí hay menos Juntas Receptoras y las distancias son más grandes que en los centros urbanos del Pacífico. En el resto del país la participación fue prácticamente igual a la de hace 4 años. A todas luces esta fue una payasada más del circo nicaragüense. Ilegal al ser organizadas por un grupo de ciudadanos que no tienen ninguna autoridad constitucional y mucho menos moral para hacerlo y al romper una ley constitucional al aceptar que algunos candidatos se reeligieran.
A pesar de todo esto; se obtuvieron algunas ideas del contexto político actual en el país. Del Padrón Electoral Total, sólo el 30% depositó su voto en la Casilla 2, vale recordar que algunos que votaron en esta casilla lo hicieron por la persona y no por el Partido ya que el Frente Sandinista en algunas municipalidades se encargó de escoger a personas rectas y probas para que los representara. Aunque no se le endosa este repudio al partido gobernante a ningún partido de la oposición.
A sabiendas de esto es necesario que los actores políticos del país no se queden de brazos cruzados e intenten capitalizar este apoyo. Es conocido que en las filas ajenas al oficialismo se carece de un líder que aglutine en una sola bandera al voto antifrentista, pero es justo y necesario que este panorama cambie en las próximas elecciones.
Nuestro trabajo como ciudadanos es demandar una remoción total del Consejo Supremo Electoral por uno en el que los nicaragüenses puedan confiar, debemos de demandar el despido inmediato de los actuales ciudadanos que usurpan los cargos en las oficinas cercanas a Metrocentro.
Se necesita una campaña de concientización en la ciudadanía para que no permanezcamos apáticos ante la problemática social, la indiferencia está costando demasiado y poco a poco se cercenan nuestros derechos básicos y se irrespeta vulgarmente el derecho a decidir nuestras autoridades. El camino es largo, pero honestamente, el panorama es alentador. A pesar de que se fraguó otro fraude a vista y paciencia de la Nación, también se descubrió que la mayoría abrumadora de la sociedad está cansada del status quo. La cuestión es canalizar las energías y encontrar un camino unificador.

2 comentarios:

  1. Excelente articulo, uno de tus mejores! Y tenés toda la razón la responsabilidad está en nuestras manos y definitivamente fue una lección para todos. Hasta varios amigos sandinistas que conozco no salieron a votar, hay una apatia generalizada y el reconocimiento de que no podemos seguir asi.

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  2. La Responsabilidad es hacer que su gente vaya a Votar y no estar llorando, no enviaron a su gente a votar, los sandias mandaron a su voto duro y ahora Ustedes claman... Fraude, fraude, si hubiesen tenido a alguien con cerebro no lloraran tanto porque el Voto duro de los sandias fue el que Voto, sean buenos perdedores.

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